Antes, al crear un sitio o una aplicación web, la selección de fuentes era muy limitada, y solo había unas pocas fuentes compatibles con la Web, como Times y Arial. Si no querías utilizar estas fuentes, tenías que optar por Adobe Flash o insertar el texto en imágenes, lo cual generaba una serie de acciones para compensar esa decisión. Por ejemplo, las imágenes no son semánticas, no se pueden traducir en otros idiomas de forma automática y tienen un tamaño de archivo mayor que el texto. Además, el texto insertado en imágenes no se puede copiar al portapapeles del usuario, no se puede leer con software de lectura en pantalla ni indexar con un motor de búsqueda.
La buena noticia es que con
Google Web Fonts ahora es posible utilizar cientos de fuentes compatibles con la Web en tus páginas web. Google Web Fonts, que se publicó por primera vez
el pasado mayo [
inglés], te permite elegir una o varias fuentes que quieras utilizar en tu página web, blog o aplicación web, e insertar el fragmento de HTML y CSS. En unos 30 segundos, podrás tener fuentes preciosas en tus páginas que se mostrarán de forma correcta en la mayoría de los
navegadores web modernos más populares [
inglés]. Ya no será necesario utilizar imágenes o Flash para insertar la fuente que quieras.
Al contrario que Times y Arial, que son referencias de fuentes instaladas en el equipo local de un usuario, las fuentes web se publican por medio de una petición del navegador (parecido a como se publicaría una imagen). Esto significa que es posible enviar cualquier fuente web al equipo de un usuario. Los usuarios estarán encantados al ver que estas fuentes se comportan igual que cualquier texto en Arial.
Ejemplos de fuentes web, del servicio de Google Web Fonts
La adopción de la tecnología de fuentes web ha sido rápida. Google Web Fonts publica aproximadamente 50 millones de peticiones diarias[1] en unos 80.000 sitios web únicos[2], y crece un 30% cada mes. En Google nos hace mucha ilusión que el potencial de las fuentes web pueda cambiar la estructura de la Web. Una tipografía bonita hace que la navegación por la Web sea más agradable, expresiva e interesante.
¡Brindemos por una Web preciosa!
Publicado por David Wurtz, Jefe de Producto, Google Web Fonts
[1] Una petición es una llamada única a Google Font API para obtener una o más fuentes.
[2] Consideramos que un sitio web único es un dominio único, excepto el subdominio "www", que no se cuenta. Por ejemplo, www.miblog.com y miblog.com contarían como un único dominio. No obstante, pedro.miblog.com y maria.miblog.com cuentan como dos dominios.